¿Cómo? Aprendiendo a usar el lado derecho del cerebro, y no solo el izquierdo, como hacemos habitualmente. Es fácil si practicas estos ejercicios de respiración.
En la vida cotidiana estas acostumbrada a usar únicamente una parte del cuerpo: el lado izquierdo. Al cual corresponde nuestro modo de ser racional; esto ocurre en perjuicio del lado derecho, al que corresponde tu parte más fantasiosa y creativa. Los ejercicios que te proponemos en esta publicación pueden ser muy útiles para compensar este desajuste, por cuanto tienden a reequilibrar el lado derecho y el izquierdo del cerebro. Eso sí, para que funcione debes hacerlos con regularidad. En poco tiempo notaras los buenos resultados.
1. Sentada en el suelo con las piernas cruzadas, la espalda recta, los hombros relajados, el cuello y la cabeza en línea recta, cierra los ojos.
2. Tápalos con tus manos, y, sin apretar, dirígela vista a la punta de la nariz.
3. Cierra el orificio izquierdo de la nariz con el anular y el meñique de la mano derecha e inspira con el orificio derecho. Reten un poco de aire y luego expúlsalo despacio. Repite el ejercicio inspirando con el lado izquierdo.
4. Inspira, cierra ambos orificios nasales con ayuda esta vez de anular, meñique y pulgar, reten el aire cuanto puedas y luego expúlsalo suavemente repite varias veces el ejercicio.
5. De rodillas, con las palmas de las manos en el abdomen, realiza dos respiraciones completas, inspirando también con los músculos abdominales. Contén la respiración.
6. Manteniendo las palmas de las manos sobre el abdomen, espira. Continua la secuencia rápida de inspiraciones y espiraciones.